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Conoce los peligros del IoT y aprende a evitarlos
IoT o internet of things (Internet de las cosas) es el más reciente paso en la evolución de nuestros objetos cotidianos.
En términos sencillos, IoT es la capacidad de un refrigerador, una lavadora o incluso una cama de volverse inteligente, conectarse a internet y adquirir nuevas funciones nunca antes vistas.
En 2017 existen cientos de miles de dispositivos nuevos conectados al IoT y la tendencia a futuro es que existan al menos 26 mil millones de objetos inteligentes en la mayoría de los hogares del mundo.
Sin embargo, IoT también es el lugar perfecto para que los cibercriminales hagan de las suyas, pues con cada objeto conectado a la red que usemos, se abre una puerta más a nuestra información más sensible y a nuestros datos bancarios.
Por ejemplo, hace unos meses se dio a conocer el caso de que una marca popular de televisores inteligentes, era capaz de espiar a sus usuarios a través de su cámara integrada y su software de análisis de hábitos de entretenimiento diarios.
También se supo del caso en el que un hacker había sido capaz de tomar el control de un peine inteligente fabricado para enseñar a las personas a cepillarse mejor el cabello.
El problema con la popularidad de estos objetos conectados es que los fabricantes toman cada vez menos medidas para protegerse de los ataques de un cibercriminal, exponiendo a sus clientes y poniendo en riesgo sus intereses.
Ahora un hacker, puede saber dónde llevaste a tu familia el fin de semana pasado; al hackear tu automóvil inteligente o indagar cuánta leche has tomado tras haber tomado el control de tu refrigerador inteligente.
Se estima que los daños provocados por los hackers ya ascendieron a los tres billones de dólares anuales y que la creciente popularidad de los aparatos conectados al IoT no hará más que incrementar esta escandalosa cifra.
El Internet de las cosas permite facilitar la vida de las personas, pero también expande el área de oportunidad de los piratas cibernéticos que no se detienen en su búsqueda por lucrar con la información de los usuarios y las empresas.
Por eso siempre será necesario tener mucho cuidado al usar uno de estos nuevos dispositivos inteligentes dentro y fuera de la oficina, pues se vuelve cada vez más difícil saber quién podría espiarnos a través de ellos.
